viernes, 27 de febrero de 2015

ΤΡΙΑΚΟΝΤΑ ΧΙΛΙΟΙ

Tú que nos visitas, antes de hacer nada más, por favor echa un vistazo a nuestro contador de visitas y comprueba si eres el paseante de la stoa número treinta mil. Si es así, ¡FELICIDADES! Eres nuestro visitante favorito (hasta que cumplamos la siguiente visita redonda, al menos). Déjanos un comentario y descúbrenos a quién debemos el honor. Las leyes de la hospitalidad nos encadenan de ahora en adelante y, si alguna vez nos cruzamos, aunque sea en un campo de batalla, nos detendremos a intercambiarnos viejos regalos: una armadura de oro por una de bronce, o un par de besos virtuales, lo que se tercie.
Después puedes seguir con lo que venías a ver, nos encanta regalarte todo los que somos.
¡Ah!, y si en vez del treinta mil eres el treinta mil uno, tampoco pasa nada. Déjanos igualmente tu saludo, queremos conocerte también a ti
y nos quedan armaduras de oro para rato.

4 comentarios:

Blogmaníacos dijo...

¿Tampoco pasa nada si soy la 30003?
Espero, aún así, recibir escudos, armaduras, abrazos, besos,...

Ana Ovando dijo...

Aun siendo la visitante 30005, dejo aquí mi saludo y felicitación por seguir contagiando el entusiasmo por lo clásico.
Abrazos virtuales, ya pasaré a por esa armadura ;)

Mª Amada Patiño Pérez dijo...

¿Pasar? ¿Qué va a pasar? ¿A quién le importan los números? Sólo son una excusa para agradeceros el tiempo que nos dedicáis. Para regalar tenemos armaduras, cinturones de púrpura (resplandecientes, por supuesto) y copas áureas de doble asa, pero nada tan auténtico como nuestro cariño. ¿Vale?

pilar dijo...

Más interactivo si cabe. Leer a las amigas es como "el descanso del lunes guerrero"que no se bien en que consiste pero que suena a descanso y pasta mi es mucho.
Un beso y más con intercambio de lo que tengamos.
Feliz semana.
Pilar Borraz